Hasta hace no mucho, el horario comprendido entre las 17:00 y 21:00 horas, que los españoles llaman “la sobremesa”, era compuesta por novelas foráneas y experimentos varios que quedaron solo en las buenas intenciones.
Vimos novelas de diferentes nacionales: Turcas, mexicanas, brasileñas, hasta índias, en uno de los miles de inentendibles experimentos del canal nacional en tiempos de crisis que no resultaron. Y, ¿alguien se acuerda de Saras y Kumud? ¿De Asya? ¡Es que ni siquiera lograron el rating descollante que tendrían si las echara el Mega!
En cualquier modo, desde que “Yingo” y “Calle 7” dejaron de emitirse y con él se acabaron los programas juveniles que se basaban todo el programa en bailes, mujeres en bikini y riñas entre los integrantes del elenco (muchos de ellos hoy en diferentes realidades, algunas en el cable, otros en el evangelio y otros pocos que si lograron progresar como Jocelyn Medina y Maite Orsini), no hubo una real alternativa para evadir las novelas. Esa la tenían “Alfombra Roja” en 2010 y “A todo o nada” en 2013, sin embargo, el primero murió cuando se farandulizaron (en estricto rigor, ellos eran el invitado de piedra ya que sus notas solo se basaban en preguntar la opinión a los panelistas de los otros espacios) y el segundo fue sacado del aire por Patricio Hernández quien no quiso programas “familiares” dentro de su estación, en una decisión que todavía no se entiende.
En fin, este año al fin se tomaron cartas en el asunto, se dejaron de experimentar sin resultado (cosa que vimos en TVN con “Noticreo” y “Por ti”) y al fin vemos real diversidad donde los gustos de la gente que ve televisión a esa hora si se ven reflejados en la audiencia. Vamos por parte:
Mega tiene su maratón de teleseries como la brasilera “Sombras del ayer” (que en su país fue un completo fracaso, uno de los pocos que lleva Rede Globo), la olvidable turca “Zeynep” y la alicaída “Si yo fuera rico”, que si bien logra liderar, no tiene el rating descollante y casi inalcanzable de sus sucesores.
TVN apostó… y apostó en serio, y los resultados están a la vista. Puede ser subjetivo lo que voy a escribir en esta línea pero “Carmen Gloria a tu servicio” y “Rojo” han liderado en sus respectivos horarios, el bloque entre las 17:30 y las 21:00 logra ser un bálsamo y les da esa audiencia que no lograron las novelas exóticas que programaba el canal nacional hasta cuando Álvaro Escobar entró al aire. Solo por proponer: ¿Y si a las 15:30 programan una de las tantas teleseries que suben a través de YouTube? Tienen los derechos de las novelas de Sabatini, por cierto, todavía nos deben “Pampa Ilusión” que fue anunciada y que al final dieron otra nada que ver.
Mientras que Canal 13 tiene a “Yo soy Betty la fea” y su caballito de batalla de la hora de la once: “Caso Cerrado”. Las desopilantes historias que presenta la Doctora Polo, ya sin los pujilatos chanos que veíamos en los tiempos de cuando su programa se emitía en Red Televisión (cuando los litigantes se echaban la escenografía) y con dramatizaciones que parecen reales, también tienen bastante público.
Siendo justos y balanceados: Mega tiene su público, TVN tiene su público y Canal 13 también tiene su público, y todos se ven reflejados en las 600 casas, donde las tres propuestas alcanzan los dos dígitos de sintonía, pero solo contados programas pueden lograr dicha marca. CHV tiene que ver el panorama desde muy lejos, puesto que ni “Señora Fazilet” ni “Casado con hijos” han podido alcanzar la sintonía desbordante del resto de las estaciones.
En fin, siempre dije que cuando hay diversidad la oferta se enriquece y hay por donde elegir. Y estos programas tanto como la audiencia que están marcando, así lo demuestran.