En un nuevo capítulo de esta verdadera “teleserie interna” dentro de la cadena de Vicuña Mackenna entre los artistas y Patricia Maldonado, Mega lanzó un comunicado interno en el que el mandamás de la estación televisiva, Patricio Hernández Pérez, golpeó la mesa.
La misiva dice: “El primer objetivo de Mega como medio de comunicación es estar al servicio de todos los chilenos, representando su diversidad en todos los aspectos de la vida. Nuestros contenidos tienen la vocación de ser plurales, diversos, equilibrados y no discriminatorios. Aspiramos que nuestra pantalla integre a todos los chilenos, que represente tanto a mayorías como minorías y que sea una herramienta que contribuya a la cohesión social y a la construcción de un país más integrado y solidario.”
Continúa: “Mega en sus orientaciones programáticas declara que promueve la paz social y los valores propios de la democracia y entiende que la violencia no es una opción ni un medio para la solución de los conflictos entre personas o grupos. Cree en la dignidad de las personas, en la verdad y en la libertad responsable. Las expresiones emitidas a título personal por cualquiera de sus profesionales fuera de las pantallas de Mega no representan el pensamiento de nuestro canal ni pueden ser interpretadas como reflejo de los valores de la empresa”.
Concluye: “Nuestras plataformas de contenido no pueden ser utilizadas para la difusión de posturas ideológicas personales de ningún sector que atenten contra el equilibrio y pluralismo que como medio de comunicación estamos obligados a cumplir por convicción propia y por mandato de la ley”.
Con esto, Hernández toma partido acerca del conflicto y asegura que el canal que dirige promueve la paz social y el respeto a la dignidad de las personas. ¿Le creemos? Porque hay gente, principalmente Dominique Lattimore, que no puede decir lo mismo de la estación.