Hace un par de años, NBC había contratado directamente desde Fox News a la periodista Megyn Kelly.
La rubia, que en una oportunidad criticó duramente el exceso de sensualidad en un video de Britney Spears recibiendo una divertida respuesta por parte de la princesa del pop y que fue duramente criticada por Donald Trump en un debate del Partido Republicano, había llegado al canal del pavito multicolor como periodista. Dentro de Rockefeller 30 había hecho su talk show “Megyn Kelly Today” que iba en las mañanas durante el show matutino por excelencia de la televisión norteamericana, asi como también “Sunday Night With Megyn Kelly”, una especie de “Fantástico, O Show da Vida” o “60 Minutes” que de todas formas no le hizo ni cosquillas al periodístico de CBS.
Resulta que el martes 23 de octubre durante su show matutino, ella afirmó que desconocía el motivo por el que ya no era algo normal pintarse de negro en Halloween, lo cual fue interpretado como una expresión racial en pleno momento de sensibilidad sobre estos temas en Estados Unidos. El video de la escena fue subido por la misma cuenta oficial del “Today”.
Para quienes no saben, ella hacía referencia al “blackface”, que era un maquillaje que se usaba en los teatros para representar a la gente de color negro en el Siglo XIX, que fue prohibido en los 60s.
Fue tal la desafortunada frase que fue duramente criticada por dos compañeros de cadena, por lo que tuvo que disculparse al día siguiente, en el último programa que presentó en la emisora, ya que el espacio fue cancelado en el acto. Estos dos últimos días se emitieron repeticiones.
Como antecedente tenemos el caso brasilero del periodista “Marcao do Povo” que mientras presentaba un programa en RecordTV se burló del color de piel de Ludmilla, una cantante de raza negra, por lo que fue despedido de la señal de Edir Macedo. Aunque al poco tiempo fue contratado por SBT para un informativo pidiendo las disculpas correspondientes a la intérprete.
Como sea, esto es un ejemplo de que hay cosas que no se pueden dejar pasar en un canal de televisión y que cualquier acto desafortunado puede costar tu puesto e incluso una reputación, como ha sido la tónica en los últimos meses en la TV yankee. Como para que nuestros ejecutivos aprendan de una vez.