Ha pasado rapido el tiempo, pero TVenserio.com ha llegado a su primer año de vida.
Un año en que ha pasado de todo en la industria televisiva chilena, y todo con una sensación de como que quiere la cosa, pero con un término en común: Definiciones.
Porque después de una década para el olvido en cuanto a industria, entre contenidos basura que se impulsaron, potenciaron, defendieron y hasta intentaron exportar; hasta las consabidas pérdidas financieras y de audiencia en favor del cable y las nuevas plataformas digitales, todo este último año ha girado en torno a la definición de qué es lo que se tiene que hacer para que la TV chilena sea grande otra vez.
Hemos aplaudido cuando se tenía que aplaudir, asi como también criticado lo que se tenía que criticar. Todo sin sumarnos al tren de apoyo o del odio contra ninguna televisora en específico.
No descalificamos a nadie y siempre procuramos respetar a las personas, por mucho que no piensen como nosotros.
Hemos hecho la comparativa entre los medios televisivos chilenos con industrias de países más avanzados. ¿Por qué? Porque a eso es lo que tenemos que aspirar. La hermosa industria seriéfila española, sumado al entretenimiento norteamericano y la excelencia del resto de Europa (principalmente Inglaterra y Alemania).
Del mismo modo, creemos que en este primer año y en todos los años que vengan, si logramos influir en la toma de decisiones tanto de ejecutivos como de telespectadores; si podemos diferenciar entre un artista de primer nivel, ejemplar o que cuida su imagen hasta en el más mínimo detalle y una persona que hace noticia por tonteras, escándalos, borracheras o peleas por cualquier boludez; si logramos creer en que la televisión en Chile va a salir adelante gracias a sus profesionales y a los elementos con talento que la puedan hacer surgir, vamos a lograr cumplir con nuestra misión.
Si logramos traer lo mejor de afuera sin cambiar por nada lo nuestro, también vamos a poder decir “¡Tarea cumplida!”.
Si logramos que nuestra pequeña pantalla pueda surgir después de años encerrada en un mundo lleno de plástico y recuerde que no hay capital más importante que el humano, estaremos satisfechos.
Porque esto no se trata de los caprichos o una supuesta imposición del dueño de este sitio. Ni mucho menos de un supuesto “sesgo” a favor de un canal o en contra de otro porque hasta los medios más importantes y prestigiosos del mundo tienen su sesgo marcado, pero unos hacen más bien que otros, y en este caso el nuestro hace bien.
Esto se trata del futuro, pero más importante y que va de la mano, la renovación y la reinvención de la televisión en Chile. Esa que crearon ingenieros universitarios en 1957, esa con la que crecieron mis abuelos y mi vieja, esa que los millennials desgraciadamente no disfrutaron a plenitud y se tuvieron que conformar con tan poco.
Nuestra televisión puede dar más. Y nosotros estamos demostrando con hechos que una gran televisión chilena es posible.