En estos días en que Chile vive su crisis político-social y ahora también económica, es inevitable recordar que durante su letargo, la Argentina también tuvo un ocaso en cuanto a medios. La salida de De La Rúa en helicóptero el día 20 de diciembre de 2001 también significó un apriete de cinturones en varios medios.
El canal América, entonces manejada por el recientemente fallecido Carlos Ávila, en su minuto lideró las críticas hacia “chupete” a través de programas como “Después de hora” con Daniel Haddad, “Impacto a las 12” con Mauro Viale y “Detrás de las noticias” con Jorge Lanata. Además en espacios de entretención como el por esos días recién nacido “Intrusos en el espectáculo”, Jorge Rial aparecía de tanto en tanto con cacerola en mano haciendo su monólogo.
Después de la huida desde el helipuerto de la Casa Rosada y el paso de cinco presidentes por el sillón de Rivadavia, siendo este último Eduardo Duhalde designado por el Congreso de la Nación, la baja en los presupuestos y la crisis repercutió en la industria televisiva, que se llenó de programas popularescos. Un ejemplo de ello fue el mismo espacio del ex relator deportivo de ATC y su mundialmente famosa pelea en directo con el dirigente Alberto Samid, que incluso apareció en “Los videos más asombrosos del mundo”.
Otra viva demostración fue “Zap TV”, el controvertido espacio farandulero de Azul Televisión que no solo dio a conocer a Marcelo Polino (que acá a Chile vino en varias ocasiones a los espacios farandulitos de Chilevisión y a estelares de TVN como “Noche de juegos”), sino que también fue el escenario ideal para las peleas de Jacobo Winograd, Guido Suller y su pareja y hasta enanos que se trenzaban a golpes en vivo y en directo y con palabras de grueso calibre en pleno horario familiar. No duró mucho puesto que COMFER se puso en alerta con este programa y salió del aire, seguramente por la seguidilla se sanciones.
Y “Entre Moria y vos”, un talk show estilo Laura/Jerry Springer que el mismo canal del cubo tetracolor estrenó con la conducción de la modelo y vedette Moria Casan, el cual se caracterizaba, como todo espacio de su tipo, por las escaramusas que sucedían en aquel entonces. Mismo tenor tendría “La Corte” del mismo canal, que emulaba a “Sala de Parejas” y a otro antecedente argento: “Forum, la corte del pueblo”.
La programación del canal 2 de La Plata estaba a cargo del mismo Rial, quien crea experimentos como mantener los franjeados los sábados y vetar por completo la “bailanta” y “cumbia villera” en el programa sabatino, que hoy sigue vigente.
Fue también el año en el que Telefé cedió mucha audiencia ante Canal 13, este último bajo la dirección de programación del creador de “Pol-ka” Adrian Suar. De hecho, “Son amores” le aguó la fiesta eterna de Marcelo Tinelli y sus jodas y cuartetos obreros. Por su parte, el “canal de las pelotas” cesaba su hermandad con Azul TV: Ambas poseían como dueños a Telefónica quien por disposición de la misma COMFER vende la señal al ya citado Daniel Haddad, quien la rebautiza como Canal 9 antecedido por una fuerte campaña de intriga. Aunque manteniendo espacios popularescos como “Zap TV” y “Contrafuego” de Baby Etchecopar.
Por su parte, la televisión pública vivia otra particular metamorfosis con programas de bajo presupuesto y hasta el espacio infantil “Super Pop Kids” con el cantante Pipo Cipolatti, quien muchas veces era visto pegándole a los niños en medio del programa.
Volviendo a Telefé, la pantalla de la señal lider fue muy inestable: No duraron mucho apuestas como “Dar es dar” y “La banda de Cantaniño” aunque tuvo éxitos como “Kachorra” con Natalia Oreiro, la serie “Los Simuladores”, “Gran Hermano 3” y “Poné a Francella” con Guillermo Francella y “la nena” Julieta Prandi. Sumado a lo anterior, vuelven a tener noticiero a las 19:00 horas con Cristina Perez y Rodolfo Barili, pareja que se mantiene en la actualidad.
No será hasta 2003 cuando la estabilidad vuelve a la pantalla trasandina, sumado a la asunción en el poder de Nestor Kirchner.