En conversación via streaming con Jordi Castell a través del Instagram de Revista Velvet, la conductora Carola de Moras disparó contra la televisión actual.
Es bien sabido que ella y una facción del farandulismo chileno no se llevan bien, todo porque la ex animadora del Festival de Viña del Mar juega en lides completamente distintas a las que reinaron durante años y que provocaron la crisis de la industria televisiva, agravada por el Coronavirus y el estallido social. Como olvidar, por ejemplo, cuando Adriana Barrientos la llamó de “bicho” en una nota de “Intrusos” en el año 2013.
La rostro en un principio habló diciendo que “En la tele no engancho. Tengo mis amigos del sur de cuando tenía tres años, mi casa, mi hija, no ando haciendo amistades por la tele y eso cae mal”. Sin embargo, luego empezó a criticar la fijación de la televisión local por cierta clase de personajes: “La tele no paga la decencia, ser gente, sino que castiga al empeñoso, premia al insolente, premia al vulgar, al más agresivo”, declaró. Obviamente se refería a los llamados “farandulitos”, a los falsos ídolos y a las personas vulgares y poco empáticas que se tomaron la pantalla hasta hacerla inmirable.
Quizás para muchos, Carola de Moras es la última gran animadora de la televisión chilena, insólitamente desaprovechada por Chilevisión luego de que se le terminara la concesión del certámen veraniego. Su elegancia y prestancia, frutos de una carrera que hizo prácticamente sin agraviar ni insultar a nadie, además de su cercanía con el público la han hecho un rostro reconocido y querido por los televidentes.