Este fin de semana en su columna de El Mercurio, el rector de la Universidad Diego Portales, Carlos Peña, destrozó la labor de los políticos en matinales. En especial puso su enfoque en dos episodios de “Bienvenidos” (Canal 13): Cuando Joaquín Lavín y Francisco Vidal se disfrazaron de Bernardo O’Higgins y José de San Martín recreando el “abrazo de Maipú” y el criticado sketch en el que participaron ambos junto a Marcela Cubillos, Marco Enriquez-Ominami, Ivan Moreira y Nicolás Eyzaguirre.
En sus palabras declaró que “la participación de políticos en los matinales haciendo de bufones y los periodistas haciendo de comparsa (el sketch de este viernes fue uno más de varios) lesiona a la política y al periodismo, dos actividades esenciales de la vida democrática”.
Sumado a ello, también enfocó sus críticas en los rostros de estos espacios, donde dijo que “los mismos personajes que hacían de comentaristas livianos de la vida ajena y del show business local se transformaron en detectores de la injusticia social y en promotores de la igualdad, personas que chorrean simplezas y buenismo. No pasó mucho antes que sumaran al espectáculo a alcaldes y a algunos políticos profesionales transitoriamente desempleados. Ellos, más dos o tres médicos -adornados con un perpetuo gesto de bondad que en las clínicas disfrazan de soberbia- completan el elenco”.
El rector además advierte en su espacio que “El problema es que el fenómeno este de los matinales convertidos en sucedáneos del foro público no tiene nada de liviano (si lo fuera, no merecería una sola línea), sino que se trata de un asunto de la mayor gravedad, puesto que a pretexto de mantener despierta a las audiencias y enteradas de sus problemas, involuntariamente se las adormece y se las distrae usando de anestésico y de payasos a quienes deberían, si quisieran ser fieles a su quehacer, mantenerlas despiertas”.