Se acabó un complejo 2020, llegamos al nuevo año con un escenario completamente distinto al que hemos contado desde siempre: Por primera vez desde 2014, no hay certeza de qué canal va a ser el lider del año. ¿Fue el año que recien enterramos el último de liderazgo de Mega?
Desde ese año en específico, un canal escaló a la primera sintonía gracias a Onur, Sherezade, “Tichi Achondo” y productos de discutible calidad como los reality shows de Ignacio Corvalán y un noticiero cuyo nombre, según los estudios de mercado encargados por el mismo canal, no pegó y volvieron al nombre que todo mundo conoce, aunque no le trae buenos recuerdos. Todos los intentos de los demás canales por intentar arrebatarle el primer puesto, por mucho que hayan sido productos buenos o malos -eso dependerá de cómo lo haya mirado cada uno, por supuesto, sin sesgos de ningún tipo-, fueron en vano.
Sin embargo, en los últimos dos años comenzó a asomar la propuesta alegre y jovial de Chilevisión. La receta: Informar desde un punto de vista distinto, sumamente crítico a las gobernanzas actuales y en donde los roles de Mónica Rincón, Daniel Matamala, Matilde Burgos, Fernando Paulsen, Humberto Sichel y Julio César Rodríguez desde la franja matinal fueron fundamentales. En consecuencia, CNN Chile y el 11.1 fueron los medios más creíbles según diversas encuestas, asimismo, el matinal de la señal se convirtió con su estilo de confrontar a todos de lado y lado en la primera sintonía, por lo que en Vicuña Mackenna dieron manotazos de ahogado.
Asimismo se mejoró el área de entretención. Si hace exactos diez años daba vergüenza, ahora es una de las más queridas y reconocidas del país. Productos como “Pasapalabra”, “Yo soy”, “Podemos hablar”, “La divina comida” y la telenovela “Gemelas” fueron desde éxitos comprobados hasta fuente inagotable de memes desde las redes sociales. Todo mientras trascendidos indicaban que WarnerMedia vendería la señal a ViacomCBS lo cual, insistimos y a juzgar por las cifras de audiencia, sería un pésimo negocio.
Curiosamente en un año sumamente complejo para la industria, CHV fue el gran ganador porque con el correr de los meses, la audiencia mensual subió hasta finalizar en diciembre en un empatazo con Mega. Fue el resultado de un trabajo largoplazista que demuestra una vez más que las cosas resultan cuando se planifican bien, no pensando solamente en el rating-plata fácil que condenó al mismo sistema a la recesión. Ahora queda proyectar el 2021 como una instancia en donde lograrán superar en rating mensual al líder y proyectar ese mismo liderazgo: “Yo soy” alista su tercera temporada incluso con representantes del extranjero, el área de prensa mantendrá su línea editorial critica con las dirigencias políticas y más aún en un año tan cargado a elecciones como este (sería bueno en ese sentido que “Última mirada” y “Tolerancia Cero” volviesen a la televisión abierta).
¿Pero sabe qué? Si Chilevisión logra llegar a febrero como líder, será fruto no solo de su trabajo, sino que de su humildad. En Machasa no pasan por todas las ferias televisivas habidas y por haber definiéndose como “el grupo comunicacional más importante de Chile y del Pacífico Sur” porque saben que eso podría devolvérselos. Ni siquiera hacen cultos a la ostentación ni viven pendientes de las polémicas de sus rostros o las estrellas que asi como tienen buena presencia cuentan con un “Corazón sin vida”, como bien lo canta Aitana. Lo del canal 11.1 es distinto: Con un trabajo sólido, respetable y sin dañar a nadie se pueden lograr grandes cosas. Haciendo las cosas bien, pero en serio, teniendo un modelo de negocios sustentable en el tiempo y con la posibilidad enorme de proyectar su liderazgo sin tener que hacer “lo mismo de siempre”, puede haber un nuevo líder en la televisión abierta. Y en buena hora. Y hasta puede ser una buena noticia para Mega, porque los motivará si o si a cambiar su relato.