En nuestro país, desde el año pasado, se implementó un impuestazo a los servicios de streaming que encareció el valor de las suscripciones a las plataformas como Netflix, Spotify y YouTube Premium. Si bien se reveló hace un par de días que la recaudación en sus primeros doce meses fue mejor de la que se esperaba, no se sabe en qué se utilizará. Lo más probable es que no sea precisamente al financiamiento de iniciativas culturales o para el fomento de producciones audiovisuales como cine, teatro y series a través ya sea de Fondart o los Fondos CNTV.
Pues en España plantearon mejor la medida: Según reveló El País, se planea implementar el mismo impuesto pero con un fin más que loable: Servir como nueva fuente de ingresos para Radiotelevisión Española.
De esta forma, los mencionados OTTs deberán otorgar el 1,5% de sus ingresos anuales para ayudar a financiar la televisora pública, atendiendo además a las demandas de las empresas de telecomunicaciones y canales privados, quienes también tienen dicha carga de abonar parte de sus ingresos a la televisora de Torrespaña.
Además, las telcos que no tengan un servicio de televisión de paga vía online se verán eximidas de dicho aporte mensual a la corporación.
Esto es parte de una nueva Ley Audiovisual que la ministra de economía, Nadia Calviño, enviará en los próximos días al Congreso de los Diputados del territorio ibérico y que busca nuevos mecanismos para financiar el ente.