Lo que comenzó como una treta más para hacer frente a “Quien es la máscara”, podría convertirse en una oportunidad de oro para darle una vuelta a cómo se estructura el prime en la TV nacional, que por salud mental, demanda horarios más accesibles y una duración prudente de los programas.
Desde hace ya varios días, Mega ha impuesto un novedoso órden programático para sus espacios de alta sintonía, en parte también motivados por la emisión de la Franja Electoral: Si bien a las 19:45, “Pobre Novio” repite el capítulo anterior, a las 21:00 aparece el estreno, en una suerte de contraprogramación a los eternos noticieros centrales que, en algunos casos, retrasan el primetime a horarios indecentes. Es en este sentido que a las 21:45 comienza “Meganoticias Prime” con una duración aceptable de una hora y 15 minutos.
A eso de las 23:00 horas, “Demente” que siendo justos ha ido de menos a más en cuanto a audiencia (beneficiado por el desgaste del formato de “Yo Soy” en Chilevisión) da rienda suelta a sus últimas emisiones, aunque con la salvedad de los eternamente vilipendiados “nanocapítulos”.
Para muchos puede ser una locura, pero esta jugada de la televisora del Grupo Bethia puede desembocar en una nueva estructura dentro del bloque de máxima audiencia. Es más, podría asemejearnos a la realidad de países como Colombia, México y Estados Unidos cuyo prime empieza a las 8 de la noche. Y en el caso del país azteca, es el noticiero central el que cierra dicha franja.
Acá, ¿cómo podemos darle un nuevo enfoque? Por ejemplo en el caso de Chilevisión, tomemos el caso de que el informativo central dura dos horas, por lo que sería bueno experimentar (total, mientras compitan por el primer lugar con Mega con programas potentes no tienen nada que perder) con “Quien es la máscara” a las 20:30, dejando a Mónica Rincón y Humberto Sichel a las 22:45 aproximadamente, compitiendo con la nocturna del canal de Vicuña Mackenna. Una hora y cuarto máximo basta, es cuestión de optimizar la duración, contenidos, bloques y reportajes que se emitan. Y finalmente, a las 00:00 entra Julio César Rodríguez.
Pragmáticamente no suena mal si tomamos en cuenta que la demanda no es solo un horario prudente para los envíos nocturnos, sino que una duración correcta para el noticiero y el estelar de mayor auditorio. Nuestra salud mental lo agradecerá.