Una nueva elección que quedará en la historia en cómo, con todo en contra y con una primera vuelta en parte desfavorable, la izquierda le puso alma, corazón y vida para dar vuelta el resultado. Y lo lograron: Gabriel Boric triunfó con el 55% de las preferencias el pasado domingo y nuestro país pasó a dar clases de como combatir las noticias falsas y las difamaciones de la ultraderecha.
Ahora con el panorama más despejado y con un futuro esplendor asegurado, a la hora del balance hay que ver quienes ganaron y perdieron con sus respectivos endorsements. Si bien se ha criticado a algunos famosos por su “tibieza”, otros no titubearon y caminaron con éxito rotundo por la vía democrática.
Fue el caso del mundo de las culturas que se sumó a la campaña del dirigente estudiantil. A pesar de las críticas de un supuesto “elitismo”, ellos tienen tanta calle como cualquiera de nosotros. Actores como Hector Noguera, Gabriela Hernández, Amparo Noguera, Claudia DiGirolamo, Claudio Arredondo, Alfredo Castro y Mariana Loyola; cantantes como Manuel García, Mariel Mariel, Ana Tijoux, La Sonora de Tommy Rey, Francisca Valenzuela, Gepe, la Familia Parra y Princesa Alba; activistas como Julieta Martínez; animadores como Javiera Contador, Francisco Saavedra e incluso el histórico Ricardo Calderón.
Mención honrosa a quienes acompañaron al “millón de puertas” como Natalia Valdebenito, Nano Stern y Bombo Fica, que no se presentaron por sus credenciales que todos conocemos sino que como personas como nosotros, que luchamos por un mundo mejor.
Ya decía Nicolás Copano en 2018 que si la historia “la escriben los que ganan”, quiere decir que también hay otra: La perdedora. Quienes estuvieron con José Antonio Kast fueron las mismas personas que hicieron de la polémica una forma válida de destacarse en los medios.
Tenemos a Nano Calderón, de una vida conflictiva, quien apoyó al republicano. Daniella Chávez quien incluso ha enviado mensajes bastante viscerales en Twitter y siendo presentada en el cierre de campaña como líder de opinión (cuek) y hablándole a la misma gente que ve a ella y a quienes hacen lo que ella hace como personas vulgares; Marcelo Ríos quien como deportista quizás nos ha dado logros, pero como persona en los últimos años ha dejado bastante que desear.
El hoy agitador social Alberto Plaza, quien de destacar en la primera vuelta que “la minoría se hizo sentir” a lamentar en el ballotage que nuestro país “se fue a la B”, recalcando que dilapidó su carrera desde que se convirtió en opinólogo político; “Las Indomables” que se burlaron de Fabiola Campillai y que los programas neofaranduleros como Me Late y Zona de Estrellas incluso clamaron por su regreso a la TV abierta; y luego rostros de nula relevancia como Rosemarie Dietz.
La teoría de los dos Chiles nuevamente se vio reflejada. Mientras el mundo de las culturas se plegó con el candidato de izquierda, quienes usaron el insulto, el agravio y la burla hacia las personas (e incluso fueron más allá usando violencia incluso contra sus mismos familiares) adhirieron la opción pinochetista. Por suerte, este “nuevo plebiscito” tuvo el mismo final de 1988.