2021 ha sido un año tremendo para Katy Perry: Lo inició dandole la bienvenida al nuevo Presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, en el especial preparado por el equipo de transición llamado “Celebrating America”; y lo finalizó con una aclamada residencia en Las Vegas llamada “PLAY”.
Es en este contexto en el que la californiana apareció desde “la ciudad del pecado” para dar sus buenos deseos para el año entrante en el programa de fin de año de la CNN, conducido por Anderson Cooper desde Nueva York.
En dicha instancia, además de presentar en directo por primera vez su nuevo single “When I’m Gone” junto a Alesso, comentó en entrevista que la canción que la hacía volverse loca era “Firework”, que a la vez era su favorita para cantar en toda ocasión.
Además su aparición en la cadena de noticias de WarnerMedia dio pie para una tragicómica anécdota, que tiene que ver con una fan de la artista que viajó desde Londres a “la gran manzana” exclusivamente para verla a ella. No sabía que la intérprete de “Hot N’ Cold” se encontraba en la ciudad del estado de Nevada y su show fue pregrabado especialmente para su exhibición en el especial.