El 11 de enero en la noche, en “Meganoticias Prime”, se presentó una entrevista de Juan Manuel Astorga en el despacho del mandatario saliente Sebastian Piñera, en el que aseguró con el excesivo triunfalismo que lo caracteriza que “lo peor de la crisis ya pasó” (cuidado, que esta declaración puede pasarle la cuenta en los próximos días, más con casos COVID al alza).
Al día siguiente, en el mismo canal pero en otro horario, a través de “Mucho Gusto” un dirigente de los camioneros confesó que el paro de 2020 (si, el mismo donde incluso contrataron bailarinas ligeras de ropa para hacer shows en plena carretera) fue a pedido de La Moneda para presionar la aprobación de ciertas leyes que todavía no se aprueban en el Congreso, generando una enésima tensión dentro del segundo piso.
Mientras todo eso sucede, Javier Olivares se manda un tweet desafortunado en el que recomienda ir armado a los que piensan viajar a Chile asegurando que el país está desbordado por la delincuencia. Desde LUN ratificaron que los casos bajaron, pero la violencia para emplear los delitos ha subido considerablemente. Cómo será de malisimo el tweet que hasta en “Me Late Prime” le dijeron al otrora conductor de “Mekano” que lo publicado era una tontera del porte de una palma de su querido Miami. Y para que eso pase (tomando en cuenta además que la productora del “Huevo” fue parte de la campaña del actual presi), debió ser mucho.
A no ser que estén haciendo la gran “Grupo Clarín”, o sea, apoyar en el inicio y atacar en el final, informativamente los canales de televisión le han estado tomando el peso a lo que se transmite en sus pantallas. En estos comicios hubo un trato neutral que pasó a ser un agradable seguimiento hacia las reuniones de Boric en ese gran lugar de peregrinaje del pueblo que en la Oficina del Presidente Electo llamaron “La Moneda Chica”, que incluye hasta enviados especiales en la casona de la Universidad de Chile donde nuestro futuro mandamás afina detalles y responde las inquietudes de la gente.
Mientras que Chilevisión ultima sus detalles para separarse de CNN Chile, se está apostando por nuevos rostros que generen el recambio dentro de Machasa: Marianela Estrada empezó a conducir “Contigo CHV Noticias” junto a Roberto Cox, y honestamente, la joven periodista debería quedarse. Tiene la experiencia (estuvo un tiempo en “Primera Pagina” y ha hecho reemplazos durante varios periodos en otras ediciones) y ya es hora que se le de el ascenso que se merece. Lo mismo que hicieron en su minuto con Natalia López en Canal 13 y que, a juzgar por los resultados, ha sido una excelente decisión.
¿Y qué pasa en el lado del entretenimiento? Hay que hacer ciertas diferencias: “Aquí se baila” no es “Bailando por un sueño” ni mucho menos “Fiebre de baile”. Y ni por asomo “El discípulo del chef”, por suerte. Más allá de ciertas críticas a la obsolescencia de los concursos de baile entre famosos, se agradece que en Canal 13 hayan aprendido de su tropiezo de 2020 para hacer un estelar con un casting lo menos funable posible, en el que Sergio Lagos se mantiene realmente cómodo y en donde hay una competencia limpia, cumpliendo al máximo la premisa de “talento por sobre la fama”.
Todo mientras en el ciclo conducido por Emilia Daiber, la presencia de Daniela Aránguiz transformó a la cocinería en un lugar tóxico, con Perla Ilich renunciando al programa y con Adriana Barrientos y Pamela Díaz padeciendo de egolatría y narcisismo.
Del resto, todo sigue igual: Mega renovando su dirección ejecutiva que asumirá ni bien llegue Apruebo Dignidad al poder, TVN con un cuarto lugar en la noche con la audiencia perteneciente al nicho de las novelas turcas y que no trasciende la masividad que sí logra “Doctor Milagro” y La Red en lo suyo, bajándose del people meter en favor de la “televisión de calidad” que se pierde entre los productos de Swiss Trading Company y el sempiterno Antena 3 Directo.
Así ha comenzado el 2022 en la televisión nacional. Tal vez usted todavía la encuentre mala y tendrá razones muy comprensibles, pero donde hay consenso absoluto es que es menos decadente que la de hace diez años.