Las relaciones entre la prensa de farándula dura y el mundo de los cantantes siempre ha sido conflictiva, a tal punto de que los primeros buscan a toda costa atacar a estos últimos. Experiencias relacionadas con esto han sido varias, sin embargo, en los años recientes ha tomado ribetes tóxicos.
Un ejemplo de aquello lo dio “Zona de estrellas”, en donde se comentaba sobre los coaches de “The Voice Chile”, sin embargo la periodista Cecilia Gutiérrez dijo acerca de Cami que supuestamente (porque, sí, el periodismo farandulero siempre ha basado sus noticias en base a supuestos) “no deja ni que se acerquen”.
Luego, el conductor Mario Velasco contó una historia en la que supuestamente lo dejaron encerrado en un camarín, porque iba a pasar la artista. Contó que había sido en un 18 de septiembre, pero no en qué festival o evento, por lo que no dio información suficiente para avalar su veracidad.
El exchico “Yingo” dijo que “Justo en esa época estaba en la transición de Cami Gallardo a Cami. O sea, no se te vaya ocurrir decirle ‘Cami Gallardo’, preséntala como ‘Cami’”. Contó además que supuestamente “un guardia me para y me dice ‘no don Mario, no puede salir de su camarín’”. “Es que va a pasar la señorita Cami por acá y no puede haber nadie en el pasillo’”, acotó.
Con esto, queda claro que las relaciones entre la prensa farandulera y nuestros artistas no son de las mejores, nunca lo han sido ni lo serán. Por lo mismo, son polos opuestos y hasta enemigos declarados, debido a muchas veces las críticas a cómo trabajan o a lo que representan para la industria del espectáculo y el entretenimiento. Y en parte, ese mismo periodismo ha hecho que la industria musical no se desarrolle en nuestro país de la forma en que sí lo ha hecho en Argentina, México y España, donde los cantantes si reciben la atención que se merecen y hasta son proyectados de buena forma por los medios masivos.
Solo queda preguntarse… ¿Hasta cuándo?