Después de la final de “El discípulo del chef” algo pasó con Daniela Aránguiz, que luego de perder ante Karen Bejarano sencillamente perdió el sentido de la humanidad y se dedicó a hacer bullying a la ganadora del espacio de Chilevisión, burlándose de su complicada situación mental.
Quizás le da placer y sentido a su vida faltarle el respeto a las personas, pues lo ha hecho siempre. Y a mediados de este mes nuevamente lo hizo contra la también cantante en el show de la misma red social titulada “Con Vos”.
Y es que otra vez se burló de la depresión que tuvo Bejarano, pues en el mencionado programa dijo irónicamente que “me voy a poner a llorar entonces para que me quieran”.
Seguramente Aranguiz no sabe que de acuerdo a un estudio del Minsal hecho en 2018, un 6,2% de las personas sufre de depresión y un 15,8% tiene la sospecha de tenerlo. Y más aún, las mujeres de menor nivel socioeconómico lideraban entonces las tasas.
Y si quiere más datos duros, según otro estudio esta vez realizado por la Universidad de Concepción, un 31,5% de los chilenos tiene algún trastorno de salud mental.
Que Bejarano difunda iniciativas y sincere su estado de ánimo no es dar pena, sino que generar conciencia. Los datos son alarmantes y a reserva de un nuevo estudio de la cartera, se estima que la situación empeore luego de la pandemia. Lo cierto es que Aranguiz no solo ha pisoteado la dignidad de quien seguidamente le dedica directas e indirectas, sino que también de miles de chilenos que tienen que pagar altas sumas de dinero para costearse dichos tratamientos.