Un verdadero blackout será el que vivirá Mega, el canal que compite por el primer lugar de sintonía y que muchos meses lo consigue, y que además vive un buen pasar financiero, pero que optó por dejar a varias comunas sin su señal abierta para evitar los gastos que conlleva la migración a Televisión Digital Terrestre.
Así, la estación del Grupo Bethia informó ante el Consejo Nacional de Televisión (CNTV) el fin de sus servicios en 12 capitales provinciales.
Una fuente conocedora de la industria ha informado cuales serán esas ciudades. Ellas son Chañaral, Vallenar, Ovalle, Los Andes y San Felipe, Quillota y La Calera, San Antonio, Cauquenes, Angol, Puerto Natales, Constitución, Puerto Natales y Panguipulli. De hecho, en varias localidades como es el caso de Ovalle y Cauquenes ya simplemente dejó de transmitir, dejando a sus televidentes sin la posibilidad de ver su programación en televisión abierta, y peor, sin la opción de mirarla por TDT.
Con esto, está más que claro que la señal televisiva no es capaz de pensar en los mismos televidentes que le dieron el liderazgo en sintonía entre 2014 y 2020, a los que solo les agradece a fin de año cuando toca hacer el balance y publicitar que son los mejores, mientras que deja a gran parte del país sin la opción de ver sus novelas o sus espacios informativos y de entretenimiento. Y solo por mera falta de voluntad, a pesar de los números azules con los que cuenta la estación, los cuales según el último reporte ante la Comisión para el Mercado Financiero ascienden a más de seis mil millones de pesos.
Con parte de esa exhorbitante cifra, demás que se puede expandir su red de televisión digital, sin embargo para uno de los canales líderes de nuestra TV eso no es prioridad. Y nadie hace nada, ni siquiera dentro de dichas comunas afectadas ni en sus puestos de gobernanza.