Si hay un elemento que durante los años de mayor esplendor de la farándula chilena fue la controvertida elección de la Reina del Festival de Viña del Mar.
Lo que comenzó para honrar la belleza de alguna artista relevante en 1982 con la elección de Raffaella Carrá, desde 2008 se vino desvirtuando eligiendo a personas que no tuvieron ninguna ligazón con el certamen.
Cabe señalar que ese año se presentaron gente vinculada al género, como fue el caso de la entonces desconocida modelo colombiana Pilar Ruiz. Su elección fue caótica pues en primera, Canal 13 y TVN no presentaron candidata en señal de protesta ante tal despropósito, y junto a ello llegó la PDI a averiguar si ella contaba con papeles legales. Por ese año también fueron candidatas la bailarina Paloma Fiuza y la conductora Montserrat “Monty” Torrent, que eran mucho más talentosas que la posterior chica reality.
Desde 2009 se instauraron nuevas bases que explicitaron que la candidata debía si o si ser parte del canal organizador, del Festival en sí o de los canales que iban a cubrir. De ese modo la bella actriz Catherine Fulop, que ese año fue parte del Jurado Internacional, se quedó con la corona y enamoró a los chilenos, incluso más que los que la vieron en 1989 en “Abigail” a través de TVN.
El fin de una tradición desvirtuada con el tiempo
Con todo, es un hecho de que la irrupción de la farándula terminó por desvirtuar dicha elección, que desembocó por cierto a varias polémicas insólitas.
Esos factores más la cosificación de la mujer a través del controvertido “piscinazo” en el Hotel O’Higgins fueron suficientes cuando, por decisión de la Alcaldesa Macarena Ripamonti, se pusiera fin tras 41 años de la elección de los Reyes de la Quinta.
Así lo confirmó el otrora director de La Cuarta y también exfuncionario del SernamEG durante el piñerismo, Sergio Marabolí, en entrevista con Bio-Bio Chile.
El también productor del criticado programa “Zona de estrellas” comentó al citado medio que “es un hecho que no corre. Ella (la Alcaldesa Ripamonti) dijo que los reyes de Viña no se van a hacer, no con el apoyo de ella. Pero sí tengo información de que se está haciendo algo alternativo para paliar esta bajada de los reyes de Viña”.
Sin embargo, el también director del Diario La Hora (que precisamente ha hecho una seguidilla de notas cosificantes sobre ciertas figuras de la farándula, e incluso de cuestionadas exfiguras políticas que terminaron con casos de corrupción a cuestas como Cathy Barriga) tuvo la osadía de comparar el fin de los reinados con la decisión de eliminar con la Orquesta del Festival.
“Terminar con la Reina de Viña es como lo mismo que terminar con la orquesta, que terminaron reponiéndola, porque la gente lo pidió y porque es un clásico”, acentuó Marabolí.
Con esto se pone fin a una elección que nació honrando no solo la belleza, sino que el talento de las mujeres que iban al certamen a inicios de los 80s, pero que con el tiempo se fue degradando hasta ser el emblema del poderío farandulero. Como dato final, para este año querían candidatearse Naya Fácil, un tiktoker llamado “Reina de Chile” y hasta “la loca de las 5000 imitaciones” Raquel Castillo.