Exitoso fin de fiesta por todo lo alto. Una versión de Viña que nació con muchos temores y una prensa farandulera que no dejó de pegarle por todos lados, pero cuyo desastre organizativo lo terminó compensando la excelente calidad de los shows que vimos en el certamen.
Y el cierre no podía ser otro sino que con una cantante por la que nadie daba un peso, pero que terminó ofreciendo una actuación sobresaliente como el de la argentina Nicki Nicole.
Una de las divas de la música urbana argentina se subió al escenario de la Quinta Vergara con la responsabilidad de darle el broche de oro a las seis jornadas con éxitos millennials que conquistaron las escuchas de Spotify.
Sin embargo lo que más sobresalió, de la misma manera que sus connacionales Emilia Mernes y Tini Stoessel fue su simpatía. Con una voz dulce y con bailes que la ponen en un excelente nivel, la artista logró llevarse las dos gaviotas con una notoria emoción.
Otro sobresaliente momento fue cuando invitó a parte de sus compañeros del jurado y hace bailar a Juanita Parra cantando una versión rejuvenecida de “Todos Juntos”. Y es que las nuevas generaciones, contrario a cierto prejuicio de la ignorancia, si conocen a los próceres de otras épocas que dieron todo para darle el nivel que hoy goza la música chilena, junto con el caso de Karol G con Myriam Hernández.
Extraordinario fin de fiesta para seis noches que vaya que necesitamos, y que nos hicieron olvidar por unos instantes algunos de los problemas personales y sociales, a punta de buena música y shows de gran factura. Algo que la televisión chilena nunca debió perder y que este Festival sirvió para darnos cuenta de su importancia.