Dentro de las grandes incógnitas del Festival de Viña del Mar que se nos fue ha sido cómo va a ser la recepción hacia las nuevas autoridades asumidas en junio de 2021. Recordemos que en la “Megaelección” de ese año, de forma sorpresiva Macarena Ripamonti logró quedarse con el sillón de Arlegui 615 después de 16 años de una cuestionada gestión de Virginia Reginato.
Cabe señalar además que en 2019 la otrora autoridad que hoy enfrenta una investigación por desfalco en la Corporación Municipal recibió pifias que fueron camufladas por la producción mediante la reducción del sonido ambiente, pero que no lograron aplacar el sentir popular luego de lo que se supo en esos días. Juntamente, en 2020 no fue a las noches del certamen y a los que sí fue, ni siquiera la mencionaron.
Caso contrario ocurrió en el primer Festival bajo la alcaldía de la militante de Revolución Democrática. En las seis noches de Festival fue ovacionada por el respetable, sobre todo en las noches enfocadas al público juvenil. Recordemos que cada día la edil fue acompañada de diversas organizaciones enfocadas en bien común y en diferentes causas sociales como Comunidades Vecinales, dirigentes enfocados en el Autismo o la Comunidad LGBTQ+.
No corrió la misma suerte el mandamás de Canal 13, Maximiliano Luksic Lederer. Apenas mencionaron su nombre, el director del canal naranjito recibió estruendosas pifias del mismo público “millennial”. Seguramente su apellido vinculado a uno de los empresarios más cuestionados del país generó anticuerpos, así como también su estilo de dirigir en el otrora canal del angelito.
