Maite Orsini (RD) no eligió ser bravuconeada por una persona como Daniela Aránguiz, y menos por algo que la farandulera no ha podido comprobar. Claramente el manejo de la separación de esta última de Jorge Valdivia no ha sido de las mejores y ha elegido hostigar a la parlamentaria de la forma más ordinaria posible, tanto que M360 resolvió no hablar más del asunto.
Mientras la diputada batalla prácticamente con todos los medios en contra, ha debido también sufrir las bravuconadas tanto de los seguidores de la panelista de “Zona de estrellas” como también de los acólitos faranduleros, quienes creen ciegamente en los dichos de la exMekano y han resuelto llenar sus redes sociales de insultos, agravios gratuitos… y hasta amenazas.
Conscientes de aquello, la Bancada Feminista Julieta Kirkwood a través de la parlamentaria Karol Cariola Oliva (PC) ha expresado su respaldo a Orsini, los cuales a juicio de las mismas “son replicados por algunos medios de prensa sin verificación o segundas fuentes, exponiendo imágenes e información privada, pese al daño que pueden provocar a la honra y la integridad de las personas”.
“Hoy queremos solidarizar con nuestra compañera diputada, y si bien somos conscientes de que al ser autoridades electas gran parte de nuestra vida personal queda expuesta, nos parece que todo tiene un límite: Queremos ser categóricas en decir que es inaceptable que este espiral de violencia política y digital contra ella continúe”, cuestionaron.
Las parlamentarias estimaron que las redes sociales, feudo de la ultraderecha y también donde el farandulismo preserva el poder que perdieron en televisión “pueden tener usos perversos de los cuales tenemos el deber de legislar”.
“Existen propuestas que nos comprometemos a seguir empujando como por ejemplo el proyecto de ley que proscribe, tipifica y sanciona la violencia digital en sus diversas formas y la ley integral del derecho de las mujeres a una vida libre de violencia”, sentenciaron.
No obstante, también apuntaron a que la responsabilidad también debe venir por parte de los medios de comunicación, a quienes hicieron un llamado a ser “responsables, rigurosos y éticos con la información que difunden: el daño que pueden generar es irreversible”.
“Aún estamos a tiempo de hacer frente decididamente a este tipo de situaciones que vulneran la dignidad de las personas”, cerraron.