Hace una semana el nuevo estelar de Canal 13, “El Purgatorio, donde los famosos pagan sus culpas”, confirmó su nombre y adelantó parte de su formato. Ahora, sumados a la conducción de Nacho Gutiérrez, destaca la gran presencia humorística que tendrá el espacio, cuya premisa es hacer que los famosos paguen sus culpas haciendo el ejercicio de vivir su muerte y llegar al purgatorio.
Así, el programa que significará el arribo de Nacho en el prime de Canal 13, será también el debut de una dupla cómica que nunca antes ha colaborado, pero que tienen una amplia experiencia en festivales: Luis Slimming y Chiqui Aguayo.
Slimming, el gran triunfador del último Festival del Huaso de Olmué, cuenta con una gran trayectoria como libretista de comediantes como Stefan Kramer, Edo Caroe y Fabrizio Copano, y ya había trabajado antes con el equipo de estelares de Canal 13, precisamente como guionista de programas como “Vértigo”. “Ahora debuto como rostro, porque hay que capitalizar lo logrado”, bromea, y agrega que su rol en “El Purgatorio” junto a Chiqui será “ser el elemento lúdico del programa, trolear un poco a los invitados y jugar con ellos para ayudar a ver si pasan ‘al otro lado’”.
Por su parte, Aguayo, triunfadora del Festival de Viña 2017 y de Olmué 2019, tiene más de una década de experiencia en televisión, desde “El club de la comedia”, pasando por “Minas al poder”, el matinal de TVN “Buenos días a todos” y, recientemente, como una de las ocho panelistas de “Juego textual”. Sin embargo, nunca ha sido parte de un programa como “El Purgatorio”. “Es para mí un regreso al humor a la televisión, porque ‘Juego textual’ no era un programa de humor y mi rol era también diferente cuando estuve en el matinal. Además va ser mi primera vez haciendo un estelar en vivo, y eso me gusta porque tiene una adrenalina distinta y vamos a poder usar la contingencia”, comenta.
Alexis Zamora, productor ejecutivo del Área de Entretención de Canal 13, indica por su parte que siempre pensaron en tener comediantes en el programa. “‘El Purgatorio’ es el lugar donde los famosos vienen a pagar sus culpas, y el humor es, para nosotros, una manera de hacerlos pagar. Lucho y la Chiqui, más allá de ser buenos en sí mismos, tienen muy buena onda entre ellos, y ese fue el factor que nos hizo escogerlos. Hacen una gran dinámica, porque ambos son sarcásticos, tienen humor negro. Además, la idea es que no inventen chistes sino que se tomen de los hechos de los famosos para sacárselos en cara en el programa”, explica el ejecutivo.