Por Jaime Boetsch
Los videojuegos y los esports se han transformado en protagonistas indiscutibles del entretenimiento en Latinoamérica. Esta creciente tendencia no solo refleja la pasión de la región por el juego, sino que también responde a una serie de factores que los convierten en la forma de entretenimiento más importante en la actualidad.
- Enorme Audiencia y Mercado en Crecimiento: Latinoamérica alberga una audiencia de jugadores en constante expansión, con más de 335 millones de jugadores en 2023, según Newzoo. Esta cifra representa aproximadamente el 10% de los jugadores en todo el mundo, destacando la importancia de la región en la industria global de los videojuegos. ¿Un ejemplo más concreto? Hace dos años Roblox ya tenía 225 millones de usuarios mensuales en el planeta.
- Inversión en Esports: Los esports en Latinoamérica están en auge, y las inversiones no se quedan atrás. Se estima que el mercado de esports en la región alcanzará los $45 millones de dólares en 2023, un aumento significativo en comparación con años anteriores. Estas cifras respaldan la creciente profesionalización y popularidad de los deportes electrónicos.
- Impacto Socioeconómico: Los videojuegos y los esports generan empleo y oportunidades de negocio. La industria de los videojuegos en Latinoamérica aportó $5,4 mil millones de dólares en ingresos en 2020, según SuperData. Esto incluye no sólo la venta de juegos, sino también servicios en línea, hardware y contenido relacionado.
- Educación y Desarrollo de Habilidades: Los videojuegos se utilizan cada vez más como herramientas educativas y de desarrollo. En América Latina, programas educativos basados en juegos ayudan a mejorar las habilidades matemáticas y de resolución de problemas en los estudiantes. Esto no solo mejora la calidad de la educación, sino que también fomenta un futuro más prometedor.
- Plataformas de Streaming y Contenido Creativo: Plataformas como Twitch y YouTube han impulsado la creación de contenido en torno a los videojuegos y los esports. Streamers y creadores de contenido latinoamericanos atraen a millones de espectadores, generando un nuevo tipo de entretenimiento interactivo que combina habilidades de juego con entretenimiento. Esta tendencia demuestra que los videojuegos no solo se juegan, sino que también se consumen como forma de entretenimiento pasivo. Algunos streamers exitosos informan ingresos mensuales que superan los $10.000 dólares, lo que demuestra la viabilidad económica de esta profesión en Latinoamérica.
Los números no mienten: los videojuegos y los esports están experimentando un auge en Latinoamérica que no muestra signos de desaceleración. A medida que continuamos avanzando en la era digital, los videojuegos y los esports seguirán desempeñando un papel fundamental en la vida de millones de latinoamericanos.