Durante las últimas semanas, una seguidilla de artículos que empezaron con una nota en el Diario La Segunda pusieron en entredicho la labor del director de programación de Televisión Nacional de Chile (TVN), Roberto Cisternas. Esto debido a que varios sindicatos dentro del canal lo sindicaban a él como responsable de la crisis de audiencia que actualmente se vive.
De acuerdo al vespertino, el pasado mes de septiembre se consiguió el triste hito de tener la audiencia promedio mensual más baja de los últimos años.
Una situación que terminó esta mañana, con la renuncia del ahora exejecutivo de la estación, la cual se despidió con una carta interna a los trabajadores. “En primer lugar, quiero expresar lo feliz que he sido llevando la camiseta de este lugar durante los últimos 14 meses. He entregado todo de mí y me siento en paz por ello” comenzó relatando, según informa El Filtrador.
Sin embargo, el joven acusó falta de respaldo de sus superiores en la toma de decisiones respecto a la parrilla del 7.1. “En las últimas semanas, me he sentido vulnerable ante una campaña de desprestigio en mi contra. Lamentablemente, no he contado con la defensa que esperaba, a pesar de representar a TVN. Este tipo de situaciones ha sido recurrente y, en particular, me ha impactado la cantidad de información interna falsa y malintencionada que ha llegado a los medios”, comentó Cisternas.
“A lo largo de mi gestión, he presentado numerosas propuestas e ideas que lamentablemente no han sido consideradas. He tenido que gestionar decisiones con las cuales ni yo ni mi equipo estábamos de acuerdo. Por ejemplo, la cancelación de un programa que tenía previsto su lanzamiento en marzo debido a consideraciones de riesgo por parte del directorio, o la elección de teleseries y programas que no fueron decisiones de la Dirección de Programación”, señaló. Seguramente se refiere a las novelas turcas que hoy emite la señal y que no son de interés masivo más allá de ambos nichos de fanáticos de TVN y de dichas producciones.
Sin embargo, también hubo lugar para una autocrítica respecto a cómo ha sido su gestión. “Entiendo que mi gestión pudo no haber sido del todo satisfactoria para algunos. Pido disculpas si en algún momento defraudé expectativas. Espero que mi renuncia contribuya a una reflexión constructiva y a una visión más clara para el futuro de TVN. Llevo en mi corazón el cariño constante de los trabajadores, quienes vieron en mi compromiso y dedicación un motivo para confiar. Agradezco a quienes creyeron en mí y les insto a abrir sus corazones y mentes a la persona que ocupará mi puesto”, puntualizó, junto con agregar que hoy su área cuenta con un saldo a favor de cinco millones de pesos.
Cisternas se despidió enviando los mejores deseos para la red pública de cara al compromiso que significa ser la señal oficial de Santiago 2023. “TVN brillará quizás como nunca con el deporte, los invito a poner sus esfuerzos en eso y no dejarse llevar por polémicas dañinas. Deseo que esta situación permita una perspectiva más amplia y una renovada visión para el canal”, cerró.