Desde que se anunció como participante en el reality de Canal 13 que la presencia de Junior Playboy generó ruido en redes sociales, principalmente por la férrea defensa que le hizo antes de ingresar a Rubén, el participante acosador de “Gran Hermano”.
Por lo mismo, no debería de extrañarnos entonces el hecho de que su comportamiento dentro de “Tierra Brava” no sea ya el mismo que en otros espacios de su tipo.
De partida, han habido innumerables ocasiones en las que se peleó con Pamela Díaz. La actitud del personaje televisivo en la última semana fue tan nefasta que hasta le sacó en cara su separación innecesariamente. “¿Por qué mentiroso? Te crees la dueña del reality, por eso todos te dejan. Esta cree que soy Jean Philippe”, le dijo, causando la indignación de la conductora.
Como el contacto con el exterior está prohibido, como en todo reality, seguramente José Luis Concha -su nombre original- no sabe que hoy el conductor de “Podemos Hablar” está pasando por una terrible situación emocional que lo alejó momentáneamente de la conducción del estelar de Chilevisión, siendo reemplazado esta semana por Julian Elfembein, su primer presentador.
Asimismo, la conducta vulgar del personaje fue duramente increpada por Jhonatan Mujica, quien le reclamó una terrible acción que hizo con su jabón especial que usa debido a su alergia. Lo mismo ocurrió con Eva Gómez, con quien tuvo un fuerte encontronazo y trató a la española de “vieja” y que estaba “puro huev…”.
En “El juego de la verdad”, le pusieron distintas chapas, todas negativas. Shirley Arica lo trató de “agotador” y Daniela Castro de “vulgar”, algo que se ha visto a todas luces en el reality que puso al 13 nuevamente en carrera por el rating nocturno, al punto de complicarle la existencia a “Gran Hermano”.
Lo cierto es que Junior Playboy dejó de ser ese “personaje simpático” y pasó a ser otro rostro que realiza bullying a sus compañeros, causando malestar por sus conductas. Bueno, antes de entrar al reality, defendió abiertamente a Rubén, el acosador que fuera expulsado del programa de Chilevisión, por lo que no he de extrañar la decadencia en la que entró y que es, además, el reflejo de lo tóxica que puede ser nuestra farándula.