Siempre los hechos demuestran más que cualquier comentario que la forma en que se realizó el repechaje en “Gran Hermano Chile” dejó bastante que desear, y así lo sustentan las actitudes de Sebastian Ramírez, participante cuyas actitudes machistas han puesto en alerta a los fanáticos del reality show de Chilevisión.
Por ejemplo, durante una noche, el productor de eventos de profesión comenzó a incomodar descaradamente a sus compañeros de pieza, prendiendo y apagando las luces y molestando a algunos participantes que estaban en sus camas queriendo dormir.
Fue un severo llamado de atención de Jennifer Galvarini el que definitivamente abortó una dinámica innecesaria por parte del también influencer. “Sebastián, si tú no me dejas dormir te voy a ir a acusar con Gran Hermano. De verdad, porque ya te estás pasando”, le dijo “Pincoya” al cuestionado jugador.
Como no acató la orden de la chilota, alegó que “no sacas nada con andar ahí de rodillas. No me estoy riendo. O bien te falla la cabeza, qué hueá te pasa. Para tu hueveo, te voy a ir a acusar altiro”.
Luego, en el confesionario, dialogó que “está bien que traigan hueones tontos, pero este está chiflado entero. Que corte el show, esto a mí no me gusta. Él se hace el chistoso y yo no le encuentro ningún chiste”.
La agresión verbal continuó luego de que se pusiera fin al incómodo momento, cuando Ramírez trató a Galvarini de “vieja amargada”. “Te enojas con bromas de cabro chico y cuando se te pasa la mano, te acuerdas de toda mi familia”, le bravuconeó.
Además, como si su naturalidad es atacar a las mujeres, tuvo un fuerte cruce con iCata, quien ha ganado bastantes bonos en su instancia en la casa-estudio emplazada en Argentina. Y es que Ramírez había alegado que Cony y Scarleth estaban hablando a altas horas de la noche, a lo que la gamer le rebatió educadamente que él también hablaba muy fuerte.
Por lo mismo, empezó el bravuconeo de Sebastián con la gimnasta. “Catita, ¿sabe que más? Si quiere se cambia, si quiere no… No la defiendo más”, le dijo. Fue Capelli la que le dijo, junto a quienes estaban presentes en el salón, que no fue como él lo relataba.
No obstante, continuó hostigando a Catalina Salazar. “Ahora ella estaba hablando de cambiarse de pieza, ahí no más se las dejo. Y Cata, no te defiendo más ni te apaño más, con todo respeto. Cámbiate de pieza mejor”, expresó.
Sin embargo, la también cosplayer no quiso seguir agrandando la discusión y la cerró de forma elegante. “No hay que responderle. Le gusta… Ay, Dios mío. Lo hace solo para tener un tema de discusión, no más”, sentenció.
