Quien fuera uno de los rostros más reconocidos de la farándula chilena hoy está entre la espada y la pared en su faceta de empresario radial en la Región de Coquimbo.
Roberto Dueñas, otrora locutor y comentarista deportivo y quien fuera el “rey del tongo” durante su noviazgo con Marlén Olivarí, fue denunciado en un reportaje de El Mostrador por algunas malas prácticas que ha realizado como dueño de Mi Radio, una de las estaciones de La Serena y Coquimbo que ha agarrado vuelo en dicho sector, al punto de contar con una estación televisiva.
Los hechos se remontan al año 2019, durante el Estallido Social, cuando el exmanager de figuras faranduleras realizó duros emplazamientos a un juez, en el contexto de las protestas que pedían mejores condiciones de vida para nuestro país. Según consta el documento del Juzgado de Garantía de La Serena, el personaje televisivo “amenazó en forma agresiva, difamó e incitó el repudio público” al jurista.
En aquella oportunidad, Dueñas amenazó al citado profesional luego de que éste prohibiera el uso de balines para reprimir las protestas, y luego hostigó a su hijo, de quién reveló su colegio y el curso donde se encontraba, pues el farandulero “incitó a la comisión de actos de hostilidad o agresiones en contra de la víctima, por las actuaciones profesionales de su padre”.
Por este hecho, se logró un acuerdo conciliatorio entre las partes, en donde él deberá pedir disculpas públicas en la audiencia y en su programa diario en la citada radioemisora.
En concreto, Dueñas ofrecerá una “carta de disculpas y retractación dirigida al presidente de la Corte de Apelaciones de La Serena, y una carta de disculpas dirigida al presidente de la Asociación de Magistrados de la jurisdicción”, según informa Radio Bío-Bío.
