Hasta el día 10 de noviembre de 1984, la historia de Chile en el Festival Iberoamericano de la Canción creado por la Organización de Televisión Iberoamericana (OTI) era de dulce y agraz, como que se estaba a punto pero no se alcanzaba.
Desde el primer representante, que fue el cantautor Guillermo Basterrechea en 1972, y pasando por intérpretes como José Alfredo Fuentes (en este certamen nació “Era tan solo un chiquillo”), Florcita Motuda, Capri, Antonio Zabaleta, Nino García y Wildo lo habían intentado.
Sin embargo, un trovador con bastante oficio, que había ganado el primer Festival de Viña a colores (1978) y posteriormente había traido el primer lugar en el Festival de Benidorm (1982), logró quebrar no solo la historia, sino que el triunfalismo que abundaba en México en aquel entonces. Se trataba de Fernando Ubiergo con su tema “Agualuna”, que había ganado su derecho a representar a Chile en octubre, en la preselección liderada por Canal 11 y transmitida por el hoy Chilevisión, junto con TVN y Canal 13.
La decimotercera versión del desaparecido evento, considerado como “el Eurovisión iberoamericano”, se realizó en el Auditorio Nacional de la Ciudad de México, conducido por Raúl Velasco y con la orquesta de Chucho Ferrer.
En la prensa no había gran expectación. Varios medios decían que su tema ni siquiera sonaba en las radioemisoras aztecas, como también muchos artistas nacionales decían que la OTI de ese año estaba hecho a traje y medida de la artista del momento del país del águila, que no era otra que Yuri, que jugó de local con un tema del posteriormente cuestionadísimo Sergio Andrade, titulado “Tiempos Mejores”.
Fuera de todo ello, la noche anterior a la OTI, Televisión Nacional emite un especial de “Magnetoscopio Musical” conducido por Raúl Matas, titulado “Ubiergo: Un poeta, un músico, un cantautor para Iberoamérica”, en donde repasaban su trayectoria musical.
Sin embargo, la sorpresa fue anunciada de forma bastante errática, porque como se pudo apreciar en la transmisión del torneo musical, subido al archivo de RTVE y posteriormente en YouTube, primero se anunciaron el tercer y segundo lugar, y luego de una pausa publicitaria, el hombre del “Siempre en Domingo” y que ese año fuese presidente del jurado del mismo evento viñamarino, visibilemente ofuscado, anuncia a Ubiergo como el vencedor de la contienda, recibiendo el trofeo de manos del aún más cuestionado presidente de la FIFA de entonces, el brasileño Joao Havelange.
Existen muchos mitos respecto a lo que ocurrió también esa noche: Que hubo un montón de merchandising preparado por parte de los mexicanos para celebrar una victoria de Yuri que nunca llegó y que vaya uno a saber en donde fueron a parar, o que efectivamente Velasco estaba molesto porque no había ganado su país, una de sus regalonas que presentaba cada semana en el show de variedades más importante de Televisa. Incluso está el rumor de que el animador dominical consideraba el tema “muy comunista”, o que la cantante de “El apagón” terminó en un sanatorio junto a su madre.
Lo que si fue un hecho es que alguien le rompió su guitarra en los camarines a Ubiergo. Hasta el día de hoy, no se sabe si fue un fanático de la blonda o si fue alguien de su equipo. Lo que si se sabe es que “Agualuna” quedó en el inconsciente colectivo de los años ochentas, tanto que fue usada posteriormente en varias preselecciones nacionales.