El capítulo del pasado miércoles de Fiebre de Baile, emitido por CHV, desató una ola de críticas contra Vasco Moulian, jurado del programa, por su trato hacia la participante Nidyan Fabregat.
Según el Consejo Nacional de Televisión (CNTV) a Bio-Bio Chile, más de 100 denuncias fueron ingresadas por televidentes que calificaron su comportamiento como “trato indigno, despectivo, abusivo y de humillación pública”.
Durante la emisión, Moulian increpó a Fabregat por llegar tarde a un ensayo, el cual tanto la española como la producción del programa negaron, pero la discusión entre las partes derivó en una baja calificación y su posterior eliminación.
Sin embargo, el tono y las palabras utilizadas por el jurado fueron consideradas humillantes por la audiencia, especialmente al desconocer las labores maternales de la participante y no retractarse tras saber que ella había dejado a su hija en la sala cuna.
Fabregat expresó sentirse afectada por el trato recibido: “Me sentí pasada a llevar, yo le tenía cariño a él antes”, declaró tras su salida del programa.
Las denuncias también señalan que Moulian expuso de forma altanera aspectos de la vida privada de Fabregat, revictimizándola por su experiencia de violencia intrafamiliar y evidenciando su vulnerabilidad emocional y económica.
Vasco Moulian saca ronchas en televidentes de “Fiebre de Baile”
El episodio ha generado un debate sobre los límites del rol de jurado en televisión y el respeto hacia los participantes, especialmente en contextos de exposición pública. La falta de disculpas por parte de Moulian ha intensificado el rechazo en redes sociales, donde se exige una revisión ética de su participación en el programa.
El CNTV deberá evaluar las denuncias recibidas y determinar si corresponde aplicar sanciones al canal o al jurado involucrado. Mientras tanto, el caso pone en evidencia la necesidad de protocolos más claros para proteger la dignidad de quienes participan en espacios televisivos.
